Lecturas de julio


«La mayor parte de las cosas se rompe, incluidos los corazones. Las lecciones de la vida no dan sabiduría, sino cicatrices»

Con esta maravillosa frase de Wallace Stegner que pone colofón al libro de Jetta Carleton, Cuatro hermanas, encabezo el recuento de lecturas del mes de julio, un mes magnífico tanto en cantidad como en calidad, lecturas con las que he aprendido, reflexionado, llorado y, por supuesto, sanado mis cicatrices. Libros que te ponen frente a la vida, a nuestro pasado, ese que nunca podrán arrebatarnos pase lo que pase en el futuro, que diría mi adorada Simone de Beauvoir, pero que a veces pesa. Un pasado que, con libros como estos resulta más liviano, un presente que resulta más fácil de entender y un futuro que invita a luchar siguiendo el espíritu combativo de Rebecca Solnit.



1. Cuatro hermanas. Jetta Carleton. Qué maravilla. Qué libro más bonito. Qué buen sabor de boca deja no solo por las historias que cuenta o por cómo lo cuenta sino también por dónde lo cuenta. Este es uno de esos libros que te reconcilian con la literatura sencilla, cotidiana, tranquila pero cuidada, mimada, amada. Uno de esos libros que puedes leer y regalar sabiendo que quedarás bien y que la persona te lo agradecerá. Una obra a fuego lento deliciosa pero, no se engañen, de una gran profundidad psicológica y emocional. Porque la vida, como las efímeras Damas de la Noche, aunque amarga, también puede ser dulce, ¿no creen? [Nota: sí, lo han adivinado. Se trata de uno de los libros de cabecera de mis libreras de @Lib_Mujeres, no podía ser de otra manera ;-)]

2. Sólo para Mujeres. Marilyn French. Historias de mujeres reales para mujeres reales. ¿Pueden leer este libro los hombres? Por supuesto que sí, es más, sería aconsejable que lo hiciesen, aunque la traducción al castellano del título pueda echar para atrás a muchos hombres y a no pocas mujeres (tal y como comenté en su reseña). Un libro sobre la sororidad con el que la autora rompió muchísimos tabúes al hablar de temas tales como el suicidio (debido a "ese problema sin nombre" del que hablaba Betty Friedan), el aborto, la bisexualidad, el lesbianismo, el sexo... Toda una novela feminista de una calidad notable.

3. La ridícula idea de no volver a verte. Rosa Montero. Mira que he oído hablar de este libro, y que me lo han recomendado hasta la saciedad. Mira que me lo he encontrado una y otra vez en librerías, Ferias y bibliotecas. Y entonces, me pregunto, ¿por qué he tardado tanto en leerlo? Los diarios de Marie Curie sirven de punto de partida para que la autora realice una introspección personal sobre su propio duelo y, de paso, sobre múltiples aspectos de la vida (amistad, relaciones padre/madres e hijas, maternidad, amor, desamor, muerte, vocación, profesión, identidad...) desde una perspectiva feminista que reconforta. Lo ridículo de este libro es no leerlo, creanme. 

4. Los hombres me explican cosas. Rebecca Solnit. Nueve ensayos brillantes en los que la autora, con la ira como germen tamizada por la introspección y la reflexión, y subrayada por un espíritu de lucha y compromiso analiza multitud de realidades que afectan a día de hoy al colectivo de mujeres. Con una documentación excelente y su propia voz alta y clara, Rebecca nos atrapa en esas telarañas que tejen las abuelas araña, en la oscuridad luminosa de Virginia Woolf, en el peligro que el mero hecho de ser mujer entraña en la vida diaria de países incluso "avanzados" como el nuestro, en la débil concepto de nosotras mismas que seguimos teniendo en presencia de "hombres muy importantes", en la reflexión sobre el feroz capitalismo que se ensaña con los más débiles... Un libro que, sin duda, hay que leer. 

5. En Grand Central Station me senté y lloré. Elizabeth Smart. Para leer este libro tuve que hacer un auténtico ejercicio de transmutación emocional transitoria. No empatizaba con ese concepto de amor absorbente-dotador de identidad que la autora sintió en el momento de escribir este libro pero tampoco quería perderme el precioso y preciso lirismo que como un aire fresco fluía entre sus líneas. Y el esfuerzo mereció la pena. Leer implica viajar a otros mundos tanto físicos como emocionales y esta pequeña novela a mitad de camino entre la prosa y la poesía, es un viaje a las profundidades del ser humano. Con Elisabeth me senté y lloré, ella en Grand Central Station, yo en Atocha, por mí misma, por ella, por muchas cosas... Abrir una de sus páginas al azar es garantía de encontrarse con una frase que merece ser disfrutada y releída y vivida. Maravilloso. Duro pero maravilloso.

6. Regreso a Berlín. Verna B. Carleton. Imagina que regresas a tu ciudad natal, aquella en la que pasaste la infancia y la adolescencia pero que hace más de veinte años que no visitas. Imagina que, como siempre que regresamos a algún sitio, buscas lugares de referencia donde poder representar tus recuerdos, apoyarte para crear un escenario que contar a los demás y a ti mismo. Imagina que llegas allí y ya no hay nada más que ruinas o edificios que poco o nada tienen que ver con esos que recordabas. Las calles han cambiado de nombre. En el lugar donde había una calle estrecha ahora hay una avenida o viceversa. Imagina que el motivo es que la ciudad ha sido destruida por la Segunda Guerra Mundial y que tú, al igual que ella, tienes que reconstruirte. Berlín. Año 1957. Eric, el protagonista, borró de su memoria todo su pasado, pero éste es malvado y siempre regresa. La única forma de vencer a sus demonios es reconciliándose con él y ello implica volver a recordar, rescatar del sótano de la memoria nombres, situaciones, traiciones... Una gran novela de personajes donde la autora (a su vez narradora) se invisibiliza para poder mostrar a esos hombres y mujeres ante nosotros y que así los conozcamos de primera mano. Una gran novela.

7. Infiel. Joyce Carol Oates. Oates, siempre vuelvo a Oates. Así que poco puedo decir de ella que no haya dicho ya en ocasiones anteriores. Simplemente dos cosas: la primera, que a pesar de conocerla nunca deja de sorprenderme; la segunda, que a pesar de haber leído muchísimas cosas sobre sus personajes, éstos tampoco dejan nunca de sorprenderme. Oates nada a pulmón con una maestría brutal en los mares más oscuros de la psique humana. Estremece, emociona, aterra, conmueve, siempre con una cierta dosis de crítica social y, especialmente, de denuncia de la situación de la mujer. ¿Quieres saber cómo se siente una mujer acosada por un hombre? ¿Quieres saber cómo se siente una mujer a la que le están haciendo un mansplaining o intimidándola? Si eres mujer no hará falta que nadie te lo cuente pues lo más probable es que lo hayas vivido de cerca o en primera persona, y si no, Oates lo narra con su genialidad propia.

Extra: Feminismo para Principiantes. Nuria Varela. Si este libro está en el último puesto de este ranking es simplemente porque más que en un libro de literatura es un libro manual. Un manual, eso sí, imprescindible y necesario para introducirse en el mundo del Feminismo. En una primera parte nos hace un acercamiento histórico al movimiento en el que descubrimos con estupor y cabreo lo que ya imaginábamos: numerosas mujeres que deberían figurar en los libros de historia fueron invisibilizadas. De aquello que no se habla, no existe, insiste una y otra vez Nuria Varela a lo largo del manual, y no puedo estar más de acuerdo con ella. De ahí que sea tan importante dar visibilidad a mujeres (como hacen proyectos como @AdoptaunaAutora) y hablar una y otra vez de mujeres, de problemas de las mujeres, de situaciones que viven las mujeres, poniéndoles nombre y reivindicándolas una y otra vez. Para aquellas que ya tengan conocimientos sobre el feminismo quizás este manual le sepa a poco pues, al fin y al cabo, es un Feminismo "para principiantes", pero aun así es un trampolín excepcional a través del cual recabar temas, bibliografía y perspectivas. ¡Bravo Nuria!


Comentarios

  1. Hola!
    Justo ahora iba a leer tu reseña de "Cuatro hermanas" y me encuentro con un resumen de tus lecturas. Dejando ese libro aparte, me ha fascinado cómo hablas de Joyce Carol Oates, porque siempre tengo su nombre en la lista de la biblioteca y nunca me decido a coger un libro suyo. "Nada a pulmón en los mares más oscuros" WAO. Con esa frase has captado toda mi atención y a partir de ahora, estaré más que atenta a lo que digas sobre ella :)
    Un saludito, voy a seguir leyendo por aquí!

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    1. Hola Marbaden!
      Oates es difícil de describir. Tiene una voz tan propia y diferente que me resultó complicado intentar transmitir todo lo que siento cuando lo leo así que me alegra muchísimo que te haya gustado lo que he comentado sobre ella. Como ese bosque tuyo, y como todos los bosques, tiene lados luminosos y otros sombríos y eso la hace única.
      ¡Gracias por pasarte por aquí y nos seguimos leyendo!

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  2. Hola Raquel. Soy @rockzio . Me ha encantado tu blog. Lo seguiré a partir de ya.

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    1. ¡Muchísimas gracias, Rozío! Qué alegría encontrarte por aquí ¡Eres más que bienvenida a mi pequeño rincón! Disfrútalo, trastea y comenta todo lo que te apetezca. Un besazo

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  3. Gracias por engordarme...la lista de "LIBROS PARA LEER". Jejeje, de verdad, qué interesantes cada una de las lecturas. A ver si me estreno con Joyce Carol. Anoto a Cuatro Hermanas y a la de Elizabeth Smart. Marylin me tiene entusiasmada. Un abrazo y me alegro de tu retorno bloguero post vacaciones.

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    1. Estas listas de "libros para leer" interminables... ¡qué vidilla nos dan! Jajaja. Cómo me alegro de que estés leyendo a Marilyn (ya me contarás) y qué suerte leer por primera vez Cuatro Hermanas... cuando me enteré de que no había escrito ningún libro más decidí degustar cada frase sabiendo que si no me quedaría con ganas de Jetta (como así ha sido).
      Gracias por tu visita, querida Pilar. Así da gusto regresar de vacaciones...
      Un besazo

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  4. Hola, Raquel.
    Leí "Los hombres me explican cosas" gracias a ti. Siempre hago un alto por aquí a ver tus publicaciones (y sigo todas tus lecturas de Goodreads y comentarios). La novela de Rosa Montero también ha caído este verano y me ha parecido fantástica. Me llevo apuntados "Feminismo para principiantes" y "Cuatro hermanas".
    Pero sobre todo, esta es mi excusa para agradecerte las entradas de tu blog, la visualización de estas novelas que nos traes y también las reflexiones que vuelcas en tus entradas. Son MUY NECESARIAS. Así que, ¡gracias!
    Un beso.

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    1. Hola, Lidia
      ¡qué alegría encontrarte por aquí! Jo, y muchísimas gracias por tus palabras *me has sacado los colores*. Creo que es muy importante dar visibilidad a muchísimas autoras y libros que, desgraciadamente, no aparecen ni en la lista de los más vendidos ni en blogs de novedades. A veces me da la sensación de que solo se lee y se habla de "lo último y más reciente", como si en esto de la literatura también hubiesen modas, cuando es algo tan íntimo y personal que debería ser atemporal.
      Mil gracias y ¡Bienvenida!
      Nos leemos.
      Un besazo

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  5. No entiendo cómo no se me había ocurrido visitar tu blog para inspirarme. *___* Lo tendré como referencia para #LeoAutorasOct y para todo, en general. Durante octubre iba a leer algunos libros feministas, entre otras cositas. Me estaba costando mucho crearme una lista porque los libros que desearía leer no están en casa y en la biblioteca del pueblo tampoco tienen demasiados, je. En fin, que agradezco mucho esta lista. ¡Voy a buscarlos! <3 Un besito. :*

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    1. Un millón de gracias, Diana. Si es que, tienes razón, esto de pasarse por los blogs es todo un peligro porque nuestra lista de pendientes nunca deja de crecer. Me halaga muchísimo que recurras a esta lista para enriquecer tus lecturas. Espero que te gusten y disfrutes muchísimo leyéndolas. ¡Mantenme informada!
      Un besote

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